¿Te acuerdas de Francesco Moriero?

- Solo tuvo una oportunidad de representar a la selección italiana en la Copa del Mundo, jugando tres partidos en Francia 98, en la que la "Azzurra" no pasó de cuartos. Su trayectoria internacional duró poco más de un año.

Y eso que fue uno de los atacantes más afamados de su época o, al menos, así lo recuerdo yo. Poco logros adornan su palmarés personal, esa Copa de la UEFA que alzó con el Inter de Milan. Sin salir al extranjero, "Checco" Moriero jugó para otros equipos como el Lecce, Cagliari, Roma y el Nápoles.

Fue un extremo diestro que también era válido como interior. Aunque no era exageradamente goleador, tenía un don especial para burlar al contrario y encontrar la mejor opción de pase para encontrar con facilidad el gol.

Francesco Moriero nació en Lecce (Italia), el 31 de marzo de 1969. Pronto ingresaría en la academia de la Unione Sportiva Lecce, donde crecería como futbolista, debutando en 1986 en la segunda división italiana.

En cuestión de un par de años, el Lecce celebraría su anhelado ascenso a la alta categoría, con un Moriero decisor que hizo 3 goles en 35 partidos. Se mantendría en la élite durante tres campañas, e incluso aguantaría un año más con el retorno del equipo al segundo nivel, antes de fichar por el Cagliari en 1992.

Con Carlo Mazzone seguiría siendo determinante en el conjunto de Cerdeña, donde permaneció un par de años figurando como una de las grandes revelaciones del Calcio italiano, sumando otros 4 tantos en cerca de 60 partidos.

Moriero se uniría a la AS Roma en 1994, por 8.500 millones de liras. Al equipo granate se marcharía con Mazzone, quien seguiría confiando en "Checco" para respaldar una zona de ataque con Abel Balbo y Daniel Fonseca.

Durante sus tres años vinculado a la entidad romana, el punta de Lecce continuaría haciendo una fantástica labor que iba a llamar la atención de los mejores clubes de Europa, alcanzando ya una buena cifra de partidos en la liga italiana, aunque sin títulos que levantar hasta la fecha.

Una buena opción para disfrutar de gestas sería fichar por uno de los grandes. En el verano de 1997, Luigi Simoni se lo llevaría al Inter, donde verdaderamente iba a conseguir competir a lo grande, optando a títulos.

Al lado de estrellas como Gianluca Pagliuca, Diego Simeone, Taribo West, Youri Djorkaeff y el brasileño Ronaldo Nazário, el Inter quedaría segundo en la clasificación liguera, solo por detrás de la Juventus.

Los "nerazzurri" se mantendrían entre los puestos más altos de la liga durante aquellos años, compitiendo a muy buen nivel por Europa y con un Moriero que tendría especial protagonismo en la obtención de la Copa de la UEFA, el único trofeo importante del de Lecce.

En sus años con el Inter le quedó esa espina clavada de no poder ganar el campeonato liguero, pasando tres temporadas en el club y alcanzando esa internacionalidad que le permitiría acudir a la Copa del Mundo de Francia.

En 1998, Francesco Moriero acudió con Italia al Mundial de Francia.

- Se marcharía de Milan en el año 2000, para afrontar sus últimos partidos en la liga italiana con el Nápoles, donde no iba a vivir momentos fáciles, empezando ya mal aquella nefasta temporada 2000\01, a las órdenes de Zdenek Zeman.

Con la marcha del técnico checo la cosa iría a peor. Moriero contribuiría en la medida de lo posible, pero la forma física no ayudó en mucho. El Nápoles descendería a la Serie B en 2001, y el extremo colgaría las botas.

No fue muy extensa su trayectoria internacional, pues poco más de un año tuvo la oportunidad de representar a la selección italiana. Sus números fueron de 8 partidos y 2 tantos, llegando a participar en un solo torneo importante, el de la Copa del Mundo que se celebró en Francia (1998).

De cerca: Kevin Lasagna.

 

- Este delantero ha tenido la oportunidad de debutar para la selección italiana, aunque ya llovió de eso. No ha podido estrenarse como goleador en sus escasas apariciones con la "Azzurra", y últimamente no acude a las citas internacionales.

Actual jugador del Hellas Verona, tuvo su mejor momento con el Udinese Calcio, con el que explotó de cara al gol. Alcanzó su máximo esplendor en la Serie A, pero aún no ha podido celebrar títulos importantes en lo que lleva de carrera. También ha jugado para otros clubes como el Carpi o Cerea.

Tiene apellido de deliciosa receta italiana, Kevin Lasagna. Este atacante de treinta años nació en la localidad lombarda de San Benedetto Po (Italia), el 10 de agosto de 1992. En la Sambenedettina forjó sus inicios. 

En 2005 se unió a la disciplina del Chievo, donde tuvo cuatro años de formación sin contemplar la opción de llegar al primer equipo, por lo que volvería a su lugar, para seguir compitiendo a nivel regional con el Suzzara Sport Club.

Lo suyo es jugar como delantero centro, aunque perfectamente puede cumplir con las tareas de un talentoso mediapunta. Además de ser un futbolista creativo, Lasagna tiene un claro perfil goleador, con rápidos e inteligentes movimientos en las proximidades del área, donde es toda una amenaza para el rival.

Jugaría para el Governolese entre 2011 y 2012, antes de recalar en el Cerea Calcio. Compitió en la Serie D durante un par de años, pasando después a representar a la Associazione Calcio Este, de donde se iría al AC Carpi.

Por ahí llegarían sus posibilidades de poder competir en los más altos niveles, debutando en la segunda división italiana el 13 de septiembre de 2014, entrando como suplente en un partido con empate ante el Crotone (1-1).

Kevin acabaría convirtiéndose en una de las grandes armas de ataque para el cuadro de Módena, al que ayudaría a subir a la Serie A al término de la temporada 2014\15. De esta forma, el joven punta se estrenaría en la máxima categoría con 5 goles en 36 partidos, aunque el Carpi descendería en 2016.

Lasagna competiría durante un año más en la Serie B, pero pronto contaría con ofertas para volver a la élite del fútbol italiano. Después de sonar para varios clubes, en enero de 2017 ficharía por el Udinese Calcio.

Con el conjunto de Udine iba a alcanzar su mejor momento futbolístico, contando con todo el apoyo del técnico Massimo Oddo. En su primera temporada dejaría una docena de dianas, pasando a ser una de las grandes revelaciones ligueras.

Gracias a ello, Roberto Mancini le tendría en cuenta para debutar con la selección nacional, y Lasagna sabría mantener el nivel en las siguientes campañas, llegando a marcar 10 tantos en el ejercicio 2019\20. Sin embargo, en mitad del siguiente, el jugador aceptaría salir cedido.

Stefano Okaka le ganaría el sitio en la delantera del Udinese, y eso propiciaría que Kevin Lasagna fichase por el Hellas Verona el 26 de enero de 2021. Allí competiría por el puesto con el croata Nikola Kalinic.

A partir de 2018, Lasagna tuvo la oportunidad de jugar sus primeros partidos con Italia.

- Finalizaría la temporada con otros 2 tantos en la Serie A, y la cláusula obligatoria haría que Lasagna se quedase en Verona, donde no cuenta con toda la confianza para recuperar su mejor versión en una liga que lleva compitiendo varios años.

Ahora tiene a Gianluca Caprari y Giovanni Simeone como competidores en la delantera. Lasagna lleva un total de 214 partidos en la primera división italiana, en la que ha hecho 40 dianas hasta el momento. 

Ahora querrá ganarse la titularidad para recuperar su papel internacional, el que inició cuando jugaba para el Udine. El 14 de octubre de 2018 asumió su primer partido frente al combinado de Polonia, al que se ganó a domicilio por 0-1. Lasagna ha participado en 7 partidos, pero aún no se estrenó como goleador.

¿Te acuerdas de Dimitris Salpingidis?

- De cara a la temporada 2015\16, Salpingidis estaba en la nómina de jugadores disponibles de Igor Tudor con el PAOK. De forma sorpresiva, jugador y club acordaron separar sus caminos y el veterano atacante se retiró. Sin duda, el equipo de Tesalónica fue el más importante de su carrera. Y toda esa carrera se desarrolló en la liga helena, en la que representó a otros como el AEL Larissa, Kavala y Panathinaikos.

Dimitris Salpingidis (Δημήτρης Σαλπιγγίδης) podría haber brillado en cualquier liga importante de Europa. Fue uno de los mejores puntas griegos de su época, internacional por su selección durante casi diez años que participó en los Mundiales de 2010 y 2014. Concursó también en la Euro de Polonia-Ucrania 2012.

A punto estuvo de ser convocado por Otto Rehhagel para aquella gloriosa Eurocopa de Portugal 2004, en la que los helenos sorprendieron siendo campeones. Salpingidis no debutaría para la selección hasta unos meses después.

Salpingidis nació el 18 de agosto de 1981 en Zagliveri (Grecia). Dicen que, además del fútbol, este jugador era un gran aficionado a la lucha grecorromana, incluso llegó a dedicarse a ello antes de decantarse por el fútbol.

Ingresaría en la disciplina del PAOK a mediados de los noventa, donde se estaría formando hasta finalizar la década, ya listo y dispuesto para debutar como profesional. Entonces, Dimitris se centraría solo en su carrera futbolística.

Aunque era bastante bueno en la modalidad de lucha, Salpingidis demostró que era todavía mejor como futbolista, desempeñándose como un fuerte jugador de ataque, válido para actuar como delantero, aunque con mayor tendencia a correr por la derecha como extremo. Era un gran goleador, muy bueno a balón parado.

El 30 de septiembre de 1999 llegaría su debut en la Copa de la UEFA. Salpingidis tendría sus minutos ante el Lokomotivi Tbilisi y hasta dejaría un gol, ayudando a que el conjunto de Tesalónica obtuviese una victoria por 2-0.

Aún no se le veía preparado para ganarse un puesto en la titularidad, así que el técnico Stavros Sarafis aconsejaría su cesión para coger ritmo en otros clubes de la Superliga griega. Para termiar aquella campaña 1999\00, el extremo se marcharía al AEL Larissa, para el que llegaría a intervenir en 7 partidos.

Al año siguiente saldría prestado al Kavala F.C., donde se convertiría en un líder indiscutible y haría unos partidos asombrosos, dejando 25 tantos en 43 encuentros de liga. Entonces sería el momento de buscar sirio en el PAOK.

Tendría su primera aparición liguera el 25 de agosto de 2002, en una clara victoria frente al Panathinaikos (4-1). Poco después, Salpingidis se estrenaría como goleador con los blanquinegros, en otro triunfo ante el OFI Creta.

Dejaría claro su buen momento de forma y se ganaría su puesto en la titularidad. Salpingidis ganaría la Copa en 2003, en lo que fue su primer título de su trayectoria deportiva. Llegarían más trofeos a partir de entonces, pero no sería con el PAOK, ya que en el verano de 2006 se conocería su fichaje por el Panathinaikos.

Salpingidis participó con Grecia en la Euro de 2012 y los Mundiales de 2010 y 2014.

- Pasaría cuatro años en la disciplina ateniense, en la que viviría sus mejores años como profesional al ganar su primer campeonato liguero en 2010, confirmando el doblete con la obtención del trofeo copero. 

Jugaría 119 partidos y haría 46 goles en aquellos años defendiendo la elástica del Panathinaikos. Los últimos retos de su carrera llegarían con el PAOK, al que regresó para asumir sus últimos años como futbolista, retirándose en agosto de 2015.

Cumplió un bonito sueño al conseguir participar en su primera Copa del Mundo, la de Sudáfrica 2010. Fue su primer torneo importante con Grecia, aunque después concursaría en la Eurocopa de Polonia-Ucrania 2012 y el Mundial de Brasil 2014. Salpingidis se retiró con 82 partidos internacionales y 13 tantos.

De cerca: Ferdi Kadioglu.

- Empezó jugando para la selección de Países Bajos y, en enero de 2022, quiso decantarse por Turquía, con la que ya acumula unas cuantas apariciones. El siguiente paso sería debutar en la Copa del Mundo o una Eurocopa.

Y en tierras neerlandesas empezó jugando para el NEC Nijmegen, con el que tuvo unos inicios estelares desde que debutó en la Eredivisie. Con el descenso de la campaña 2016\17, Kadioglu empezó a escuchar ofertas de otros clubes. Aprovechó para irse a la Süperlig turca, donde ahora mismo juega para el Fenerbahçe.

Con las competiciones paralizadas por la celebración del Mundial de Qatar 2022, seguro que no son pocos los equipos que se estarán poniendo en contacto con su agente, que pertenece a la compañía de Wasserman Media Group.

Hablamos de un futbolista diferente, un jugador con talento especial que posee raíces turcas y canadienses. Ferdi Erenay Kadioglu (Kadıoğlu) nació el 7 de octubre de 1999 en la ciudad de Arnhem (Países Bajos).

Normalmente actúa como lateral derecho, por zona defensiva. Pero es un jugador muy versátil, capaz de jugar por banda contraria, de interior, extremo o como volante. Ferdi es un futbolista de fino toque, un chico que ya ha demostrado que tiene mucho gol y condiciones para llegar lejos en esto del fútbol.

Kadioglu empezó jugando para el ESA Rijkerswoerd, donde estuvo creciendo jugando de forma amateur hasta poder unirse a una entidad de mayor nivel como el NEC Nijmegen, al que se unió con apenas diez años.

De buenas a primeras, Ferdi Kadioglu se iba a encontrar con la posibilidad de debutar en la Eredivisie. Ya se había advertido de la calidad que había demostrado con las secciones menores, y Peter Hyballa le subiría al primer equipo en el verano de 2016, para hacer la pretemporada a sus órdenes.

El 28 de agosto, Ferdi iba a contar con escasos minutos en la visita al campo del AZ, donde no hubo tiempo para apreciar su calidad en un encuentro que terminaría con una derrota por 2-0. El debutante tendría poco más de dos minutos.

Sin ganarse aún la titularidad, el joven carrilero dejaría ciertos detalles que entusiasmarían al público de Goffertstadion, dejando dos tantos de forma consecutiva en sus compromisos ante Utrecht y Groningen.

El jugador dispondría de algún que otro partido entrando desde inicio, incluso con la llegada de Ron De Groot, pues la temporada se iba a complicar en demasía con el paso de las jornadas. El Nijmegen haría una mala actuación tras otra, y eso llevaría al equipo a descender a la segunda división holandesa.

Nada de culpa tuvo Kadioglu, que había sido una de las grandes revelaciones del campeonato, habiendo registrado 4 goles en 27 partidos, aunque en muy pocos salió desde inicio. De cara al siguiente ejercicio, se perfilaría para la titularidad.

Siguió demostrando un buen nivel en la Eerste Divisie, pero no habría forma de recuperar la categoría pese a sus esfuerzos. Kadioglu empezaría a escuchar ofertas de otros clubes, y algunos de ellos eran extranjeros.

Kadioglu decidió representar a Turquía tras haber jugado para el combinado holandés.

- Para el NEC Nijmegen haría un total de 11 goles en 61 partidos, aprovechando una buena oferta para cambiar su país natal por el de su sangre paterna. En julio de 2018, Kadioglu viajaría a Turquía para fichar por el Fenerbahçe.

Lleva varios años compitiendo en la Süperlig turca, y ya se va acercando al centenar de partidos en un club donde se siente muy valorado. Es una de las nuevas perlas de la selección turca que hace poco decidió su destino.

Empezó jugando para las categorías menores de la selección de Países Bajos, hasta que fue convencido por el seleccionador Stefan Kuntz para representar a Turquía. El 3 de enero de 2022, Ferdi optó por representar al combinado otomano, para el que ya ha intervenido en 5 partidos internacionales.