- Uno de aquellos delanteros que tanto nos han inspirado entre los años noventa y, parte de la década siguiente, fue Filippo Inzaghi, un jugador que representó a Milan, Parma, Juventus, Piacenza y Atalanta a lo largo de su carrera.
Como internacional ya sabemos lo que fue. Jugó para el equipo nacional de Italia durante más de una década, formando parte de una brillante generación que acabaría ganando el Mundial de Alemania 2006 de forma exitosa. Inzaghi participó en tres capítulos de la Copa del Mundo y fue subcampeón de la Euro 2000.
Fue uno de los mejores delanteros de su época, ganador de dos Ligas de Campeones con un Milan que mucho se asemejó al de los noventa. Sin embargo, su año más goleador llegaría con el Atalanta en la campaña 1996\97.
Inzaghi llegaría al Milan en 2001. |
- Le hemos conocido como "Pippo" o "Alta Tensione", pues era un jugador puro nervio que se entregaba durante los noventa minutos de un partido. Además de gol, Filippo demostró que era un gran compañero de ataque para todo aquel que estaba de su lado, pues además era un jugador generoso. Su velocidad y las ganas que le echaba a los enfrentamientos con los rivales hacía que su fútbol fuera algo más que espectáculo. Inzaghi era alma y gol unidos en un mismo cuerpo.
Nació el 9 de agosto de 1973 en la ciudad de Piacenza (Italia), donde precisamente comenzaría su carrera a principios de los ochenta con el San Nicolò. También su hermano mayor, Simone, llevaría los mismos inicios que Pippo. Gran admirador de atacantes como Paolo Rossi o el holandés Marco Van Basten, este delantero diestro soñaría con llegar tan lejos como sus ídolos, aunque para formar parte del Milan aún le restaban unos años. Primero debería destacar en las filas del Piacenza Calcio, al que se incorporó en 1985 para acabar su proceso formativo en los años finales de aquella década en los que un histórico Milan iba dando lecciones de fútbol.
Con el equipo de su ciudad viviría los primeros años de profesionalidad, pasando a jugar cedido para otros clubes más modestos como el AlbinoLeffe y el Hellas Verona, con los que demostraría su potencial goleador.
En 1995 se produciría su fichaje por el Parma, que por entonces era uno de los equipos más de moda en el Calcio italiano. Allí coincidiría con futuros compañeros de selección como Fabio Cannavaro, Gianluigi Buffon o Gianfranco Zola, además del futuro atacante barcelonista Hristo Stoichkov.
Filippo no conseguiría asentarse en la titularidad, aunque al menos podría contar con una quincena de apariciones para dejar dos tantos que ya avisaban de su potencial de cara al gol, el que luciría al año siguiente.
Pero no sería goleador con el conjunto parmesano, sino con el Atalanta, al que se unió en el verano de 1996. Con este club sería máximo realizador de la liga italiana, gracias a los 24 tantos que le hicieron figurar como una de las revelaciones de su país.
En poco tiempo ya sería internacional con su selección y tenía muchos equipos interesados por sus servicios. Se supo del interés de Barça y Real Madrid, así como contó con las ofertas provenientes de la Premier League.
Finalmente se decantaría por la Juventus, entidad a la que se incorporaría por 23.000 millones de liras. A las órdenes de Marcello Lippi, Inzaghi engrandecería aún más su nombre formando una poderosa línea atacante con leyendas de la talla de Alessandro Del Piero y el francés Zinedine Zidane.
Con la "Juve" alcanzaría otros títulos que hasta la fecha no había conseguido, como el de la liga italiana, la Supercopa nacional y la Copa Intertoto. En Turín estuvo cuatro años en los que dejó 57 dianas.
Inzaghi celebra uno de los 25 tantos que logró para la selección italiana. |
- Al fin llegaría al A.C. Milan, donde Filippo Inzaghi jugaría por más de una década cosechando títulos aún más importantes, como los dos ejemplares de la Champions League obtenidos en 2003 y 2007 y las ligas de 2004 y 2011.
En aquella escuadra milanesa en la que jugó junto a los Paolo Maldini, Cafú, Ronaldinho Gaúcho, Clarence Seedorf, Gennaro Gattuso y Andriy Shevchenko, Inzaghi completaría unos números de 466 partidos y 197 goles. En 2012 se retiraría para iniciar su nueva carrera como entrenador.
Para la selección italiana hizo 25 objetivos en 57 apariciones, llegando a ser subcampeón de la Euro de Bélgica-Holanda 2000 y concursando en los Mundiales de Francia 98, Corea Japón 2002 y Alemania 2006. Del último saldría campeón y aportaría un tanto.
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