- Sigamos homenajeando a ese Chelsea campeón de la Champions League, y no hay mejor manera de hacerlo que recordando a uno de los grandes mitos del balompié que pasó gran parte de su carrera en el club londinense.
Además de su gran repertorio en la Premier League, Gianfranco Zola completó una brillante carrera profesional que terminó en Cagliari. En la Serie A también representó a grandes clubes como el Nápoles o el Parma.
Injusto es que este mago del balón solamente haya tenido participación en el Mundial de USA 94, ya que fue marginado por el seleccionador Cesare Maldini de cara al Mundial de Francia 98. Sí participó en la Eurocopa de Inglaterra 96, y para muchos -entre los que me incluyo- Zola es uno de los mejores futbolistas italianos de todos los tiempos.
- Cuesta creer que "Magic Box" se retirase del deporte sin haberse llevado un Balón de Oro, ese reconocimiento individual que todo crack quiere acariciar. Aún así, cabe reconocerle el mérito de haber hecho grandes cosas con todos los clubes por los que pasó. Aunque no tuvo la fortuna de alzar la Champions, Gianfranco pudo conquistar la extinta Recopa de Europa, la Copa de la UEFA y la Superocopa continental.
Zola nació en Oliena (Italia), el 5 de julio de 1966. Actualmente es entrenador, aunque todos le recordamos mejor por sus hazañas sobre el verde. De su clase y talento había pocos, con una visión de juego que hacía presagiar cualquier jugada que terminase ofreciendo espectáculo, pues este centrocampista era espectacular.
Tuvo sus inicios en equipos no tan conocidos, como el USD Nuorese y Sassari Torres 1903. A éste último le ayudó a obtener el ascenso a la Serie C-1, permaneciendo un par de años más hasta que los grandes clubes de Italia comenzaron a proponerle un futuro mejor. Luciano Moggi sería su glorioso descubridor, quien le invitó a fichar por el Nápoles a finales de los ochenta. Ahí cambiaría mucho su carrera.
Zola tendría sus primeras apariciones en la Serie A, debutando el 27 de agosto de 1989 en una visita a la cancha del Ascoli, en el partido inaugural del campeonato. Los napolitanos acabarían imponiendo su estilo y ganaron por 0-1.
Aquel joven Gianfranco empezaría a lucir su calidad con timidez, contando con varias oportunidades más y anotando sus primeros goles ante equipos como el Atalanta y Genoa, terminando su primera campaña con 18 apariciones.
Celebró el título de liga en su primeros compases con el Nápoles, aunque aún no sería el momento de acudir a una cita mundialista, que justo ese año sería en su propio país. Eso sí, sus méritos no tardarían en merecer oportunidades internacionales, ganando una gran reputación para poder acudir al Mundial de Estados Unidos.
Entonces ya jugaba para un Parma en el que era uno de los líderes de ataque junto a Faustino Asprilla, llevándose con el conjunto parmesano una Supercopa de Europa y la Copa de la UEFA de la temporada 94\95.
Pero si a cualquier gustoso del fútbol le preguntamos, éste nos dirá que la leyenda de Gianfranco Zola crecería en sus pasos por el fútbol inglés, en el que se inició a las órdenes de Ruud Gullit y su compatriota Gianluca Vialli.
Ambos cracks italianos deleitarían a la afición de Stamford Bridge, la que se rendiría al talento de un Zola que se establecería en Londres durante ocho años. En todo ese tiempo, el centrocampista ganaría la Recopa de Europa, la Supercopa, la Charity Shield, la EFL Cup y dos ediciones de la FA Cup.
Lástima que nunca pudo celebrar un título de la Premier o la entonces llamada "Liga de Campeones", ese torneo que ayer celebró la afición del Chelsea F.C., en el que Zola ejercería también como preparador.
Gianfranco Zola participó con Italia en el Mundial de USA 94 y la Euro de 1996. |
- En la liga inglesa cumplió con un total de 229 partidos disputados y 59 dianas. De Londres se marcharía como una leyenda que aún no daba por concluida su carrera, y para retirarse se marcharía a Italia.
Jugaría por vez última para el Cagliari Calcio, ese equipo en el que estuvo una temporada para colgar las botas con sus últimos 9 goles en la Serie A. A los 38 años, Zola ya pensaba en convertirse en entrenador.
Lástima que nunca pudo celebrar gestas con la selección italiana, aquella para la que jugó en 35 ocasiones e hizo una decena de goles. Su primer gran evento internacional fue el Mundial de USA 94, pero tras su participación en la Euro de Inglaterra 96, Zola no jugaría muchos partidos más con Italia.
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