- Ha vivido la mejor época de la selección turca, siendo partícipe de hazañas como la de quedar terceros en la Copa del Mundo de Bélgica-Holanda o llegar a las semifinales de la Eurocopa de Austria-Suiza 2008.
Es además el hombre que más veces ha representado a su país sobre le verde, copando el primer puesto con 120 apariciones. A 8 partidos quedó Hakan Sükür y a 18 Bülent Korkmaz, futbolistas ya también fuera de servicio. Por tanto, es sin duda el mejor portero que ha defendido a la selección de Turquía.
Su máximo reto a nivel de clubes fue el de competir en la Liga Española con el F.C. Barcelona, aunque no superaría las cuatro apariciones ligueras y otras tres de la Europa League. El resto de su carrera transcurrió en la liga turca.
Rüstü con sus "pinturas de guerra". |
- Rüstü Reçber nació el 10 de mayo de 1973 en Korkuteli, provincia de Antalya (Turquía). Se dice que en sus inicios como futbolista llegó a jugar como delantero, y no es de extrañar, ya que con sus 1´87 centímetros de estatura seguro que llegaba a incordiar mucho a sus rivales en el juego aéreo.
Pero esa altura también le permitiría defender bien por arriba, razón por la que en el Korkutelispor acabaría convirtiéndose en un portero casi inexpugnable. Gracias a ello, y tras destacar como profesional en las filas del Burdurgücü, Rüstü acabaría fichando por el Antalyaspor, donde ya se consagraría como uno de los mejores porteros de la liga turca.
Esta leyenda turca de la portería a la que bautizaron como "Major", parecía un teniente sacado de la guerra por ese maquillaje de color negro con el que aparentaba tener unas ojeras de una terrible noche de juerga. También podría asemejarse a un jugador de rugby o a un apache, pero la misión de aquellas "pinturas de guerra" no era otra que la de eludir los destellos de los focos del estadio o de un día muy soleado. Por ende, el guardameta turco no siempre lució este aspecto tan imponente, con el que algunos aseguraban que fue para atemorizar en un partido al delantero brasileño Ronaldo Nazário.
Rüstü es un tipo fácil de recordar, bien por sus recogidas melenas o por sus actuaciones bajo palos. Era un portero espectacular, un ser carismático y extravagante, muy a la altura del colombiano René Higuita pero en versión otomana.
Tuvo el honor de jugar para los tres clubes más poderosos de la liga turca: Fenerbahçe, Besiktas y ese Antalyaspor del que se fue para glorificar su carrera, retornando al mismo ante el fracaso de sus misiones.
Sin embargo fue el club donde se hizo popular, ese equipo que le permitiría fichar por un Fenerbahçe con el que ganaría cuatro títulos de Liga y la Copa Atatürk (copa nacional). Para el cuadro de Şükrü Saracoğlu tendría una primera etapa de diez años, coincidiendo entre medias con el maravillo papel realizado en Corea-Japón 2002.
Solo con esa fama lograría llegar a una liga tan importante como la española, y nada menos que para formar parte del Barça de Frank Rijkaard, quien precisaba de otras manos para completar la nómina de porteros con Víctor Valdés y el joven Jorquera.
No sería fácil competir por el puesto con un internacional español como Valdés, pero Rüstü había llegado a la Ciudad Condal para ganarse su propio prestigio, consciente de que debía de tener paciencia para jugar.
Para otras competiciones sería una buena alternativa, como por ejemplo la de la Copa de la UEFA, en la que jugaría su primer partido como culé ante el eslovaco FK Púchov, equipo que saldría dolorosamente goleado del Nou Camp por 8-0. En la competición europea cumpliría con dos apariciones más.
En Liga se estrenaría el 13 de diciembre de 2003, en el derbi catalán contra el Espanyol en campo visitante. Rüstü tendría buenas actuaciones, ayudando a su equipo a vencer por 1-3. El turco jugaría tres veces más en liga, las últimas como jugador blaugrana, ante Celta, Betis y Racing de Santander.
Con su selección, Rüstü llegaría a las semifinales de un Mundial y una Eurocopa. |
- De su etapa en el Barcelona no sacaría títulos, en cambio guardaría el honor de haber jugado al lado de grandes estrellas como Xavi Hernández, Ronaldinho Gaúcho o Patrick Kluivert. Por allí también andaba un joven Andrés Iniesta.
Rüstü Reçber volvería otra vez al Fenerbahçe, donde permanecería otros tres años antes de recalar en el Besiktas, el último grande de Turquía con el que se retiraría en 2012. Con el cuadro de Estambul ganaría sus últimos títulos.
Disputó dos semifinales con la selección turca, la del Mundial de Corea-Japón 2002 y la Euro de Austria-Suiza 2008. Además participó en otra edición europea, la de Bélgica-Holanda 2000. Rüstü jugó 120 partidos con la selección turca y es el hombre que más veces la representó.
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